Los productos de valor agregado producen más ganancias Probablemente los conozca. Mejillones, descornchados frescos (crudos) con un cuchillo y una de las mitades de concha (vacías) retiradas, llamadas "Moules parquées". La mitad de la concha restante, que ahora contiene la carne cruda, se proporciona con una salsa de mantequilla picada, ajo y vino blanco, queso rallado encima y se asa a la parrilla durante un par de minutos. ¡Delicioso! ¿Ventaja? Además de que se retiene prácticamente todo el sabor, olor y valor nutricional, la mitad restante también se vende como un empaque atractivo y natural. Una forma de procesamiento que requiere mucha mano de obra si se lleva a cabo manualmente y desde un punto de vista económico, los ingresos de una forma de procesamiento tan manual son marginales.

El sistema infrarrojo de Franken
Para esta forma de agregar valor, Franken ha desarrollado y fabricado un método innovador de procesamiento con resultados casi idénticos, utilizando la mitad del número de empleados. Inicialmente para Nueva Zelanda, pero cada vez más en Europa, Sudáfrica y Chile, este producto de media concha ha ganado popularidad y aumenta la demanda del mercado.

El proceso infrarrojo
Hasta ahora, el proceso infrarrojo se ha aplicado solo a mejillones. Por lo general, se utilizan los mejillones más grandes del procesamiento fresco. Después de acondicionar, homogeneizar y depurar el producto, una mitad de la concha se somete a un tratamiento infrarrojo corto con una determinada longitud de onda. El resultado es que la unión de un aductor queda "cocida suelta". El ligamento (charnela) de la concha abrirá la concha. Después de un breve período de enfriamiento, la mitad vacía se elimina manualmente. La otra mitad de la concha, llena de carne y el aductor aún firmemente sujeto, ahora puede continuar al proceso siguiente.